Novedades al terminar el año
Se han pasado dos meses sin escribir en mi blog y no puedo creer lo rápido que se ha pasado el tiempo. Después de tres semanas en la clínica de rehabilitación, siguieron tres semanas de tiempo parcial en el trabajo.
Cómo estuve ausente dos meses, se recomienda volver a la rutina laboral poco a poco y en mi caso elegí empezar con 4 horas diarias la primera semana, para continuar dos semanas más con 6 horas diarias. Fue hasta mediados de noviembre, cuando finalmente trabajé de nuevo de tiempo completo.
Sí me costó trabajo volver a la rutina, porque después de dos meses de estar en reposo, descansando y recuperando fuerzas, uno se desacostumbra a estar con la cabeza al 100%. No podía concentrarme y me cansaba después de un par de horas de estar en conferencias. Eso sin contar con lo que se me olvidó en todo ese tiempo y en los cambios que hubo durante mi ausencia. El mayor cambio fue la renuncia de mi jefa, lo que significó un cambio de equipo y de jefe!
En fin, vamos a dejar el tema del trabajo. Como les había comentado, cumplí mi propósito y me inscribí a un gimnasio, a donde voy por lo menos 3 veces a la semana. Poco a poco he ganado un poco del peso perdido y tengo más energía. Hace un par de semanas me hicieron una colonoscopia para revisar el intestino, y parece que todo está bien aunque la verdad es que todavía tengo problemillas con la digestión cuando como mucho o como cosas “exóticas” o raras.
Pero no me puedo quejar, después del susto ya estoy trabajando, comiendo y viviendo cómo antes del “incidente”. Sólo me ha quedado una cicatriz bastante grande que me recuerda todos los días, lo agradecida que estoy con Dios y que tengo que disfrutar cada momento, porque uno nunca sabe…
Y en un abrir y cerrar de ojos se llegó Diciembre con sus mercados de navidad, el calendario de adviento, las reuniones con amigas y la decoración navideña. El covid nos dio chance de disfrutar sin mascarilla y volver a tomar vino caliente o ponche en los mercados de navidad.
Este año pasamos la navidad sin Catalina que sigue en Texas por su intercambio escolar. El 24 tuvimos cena mexicana solo nosotros tres con tamales, frijoles y arroz. De postre hice flan y después de cenar, abrimos los regalos. El 25 vinieron mis suegros y comimos ganso y venado, acompañados de croquetas y col morado. Fue una navidad muy relajada, con casi 10 grados y mucha lluvia.
El fin de año mi marido y yo lo pasaremos en una cena-baile en un hotel-spa , mientras que nuestra primogénita celebrará con amigas. Ya está por cumplir 18 y definitivamente no quería pasarla con nosotros, jiji.
Y así llega la hora de despedir el 2022, un año con muchos viajes, retos, aventuras y sustos. Espero que el 2023 traiga paz a Ucrania, la economía no haga más estragos, Caty siga disfrutando su segunda mitad de intercambio y conservemos el trabajo y la buena salud.
Para empezar Victoria y yo ya tenemos boletos para visitar Monterrey durante las vacaciones de Pascua y veremos que otras sorpresitas nos depare el nuevo año. Cuídense mucho y aunque ya no escriba tan seguido, espero actualizarlos de vez en cuando. Mis mejores deseos para el 2023!!!