El diario personal de una mujer, mexicana, migrante y mamá que vive en Alemania… sus experiencias, sus anécdotas y sus opiniones!

Archivo para octubre, 2017

Vacaciones en el Costa Magica- Parte 2

Durante 10 días viajamos en el Costa Mágica a lo largo y ancho del Mar Mediterráneo, pasando por el estrecho de Gibraltar para continuar navegando por aguas del Océano Atlántico. Paramos en un puerto francés, en otro portugués, en dos italianos y en tres españoles. Conocimos 3 islas y durante cuatro días solo vimos mar y mar y más mar. En cada uno de los puertos tuvimos diferentes horarios y en general bajábamos tan pronto era posible y subíamos lo más tarde posible para aprovechar al máximo nuestra estancia. Terminábamos exhaustos pero siempre muy contentos!

A continuación les cuento un poquito de lo que descubrimos y conocimos en cada uno de nuestros destinos:

Savona. Es una ciudad típica italiana con muchas iglesias, callejones y restaurantes. Del puerto al centro solo caminamos 5 minutos y recorrimos todo el centro histórico en un par de horas. Volvimos al barco a comer y después volvimos a bajar para visitar el museo de Apple que había estado cerrado por la mañana. Fue muy interesante y emotivo ver la historia de las computadoras Mac y reencontrarme con el primer modelo de Apple que conocí hace 35 años.

Marsella. Un autobús de Costa (10€ p.p. ) nos llevó al puerto antiguo de la ciudad (a 10 kms) donde tomamos un trenecito turistico que hacía un recorrido de 1 hora por la ciudad incluyendo una visita a la iglesia Notre Dame de la Guarda que esta a 160 metros de altura y de donde se puede admirar toda la ciudad. Lo más emotivo del día fue ver a la Virgen de Guadalupe en la iglesia! Después comimos en una Brasserie típica algunos platillos tradicionales franceses para finalmente volver al barco en autobús.

Lanzarote. A pesar de haber investigado y leído mucho sobre esta isla canaria, cuando llegamos no teníamos un plan definido y lo único que sabíamos era que queríamos visitar el parque de Timanfaya. Llegando a la isla pedimos un mapa y vimos que los taxistas ofrecían diferentes tours y un alemán que recién regresaba de uno, nos dijo que valía la pena. Después de esperar un ratito llegó Chalo que nos explicó en qué consistía el tour que incluía el parque volcánico y nos subimos a su taxi. En casi 4 horas visitamos:
– el monumento al campesino
– la iglesia de nuestra señora de Dolores, patrona de la isla
– la región vitivinícola de Geria donde degustamos y compramos un vinito tinto delicioso
– los camellos que por falta de tiempo no montamos pero sí pasamos a saludar
– el parque de Timanfaya, donde un autobús nos condujo entre los volcanes mientras escuchábamos la historia de sus últimas erupciones. Muuuuy interesante! Como nos dijo Chalo, te sientes como en otro mundo!
– al final caminamos un poco por el malecón y regresamos a nuestro barco en el autobús de Costa (6€ p.p.)

Todas las viviendas en esta isla están pintadas de blanco lo que resalta muchísimo en el paisaje oscuro de la tierra volcánica. Uno de los lugares que más nos gustó definitivamente!

Tenerife. En esta isla nos decidimos por rentar un carro y descubrirla por nuestra cuenta. Con los consejos del chico de la agencia de renta de autos, visitamos:
– San Cristobal de la Laguna, donde hicimos algunas compras y paseamos por su centro histórico
– La Candelaria, donde paseamos por la playa de arena negra y conocimos la iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria. Ah, y comimos una deliciosa parrillada de pescado y mariscos.

Madeira. Después de taxi, autobus y auto rentado, esta isla la recorrimos a pie. Bueno, su ciudad capital Funchal donde tomamos el teleférico a la parte más alta de la ciudad donde conocimos los famosos «cestinhos». Cerca del puerto había un mercadito con artesanías y compré algunas cositas de recuerdo. De regreso al barco pasamos por el museo de Cristiano Ronaldo, donde tomamos algunas fotos. Madeira es una isla muy bonita y tranquila, limpia y con mucha vegetación!

Málaga. Esta fue nuestra parada mas corta y la única ciudad que ya conocíamos con anterioridad, así que nos enfocamos en caminar un poco por sus calles y buscar nuevos trajes de baño para las niñas. De casualidad llegamos a la casa natal de Pablo Picasso y la recorrimos rápidamente. Desde las 8 podíamos desembarcar pero el comercio abría a las 10 e incluso el centro comercial Muelle Uno abre a a las 12. A las 12:30 teníamos que abordar y con el dolor de nuestro corazón nos despedimos de nuestro último puerto visitado.

Roma. La capital italiana es grandísima y ofrece tanto al turista que las pocas horas que para el barco en este puerto no hubieran bastado para conocerla. Por esta razón decidimos quedarnos 3 noches adicionales al final de nuestro crucero antes de volver a Alemania. El miércoles 12 de octubre, el autobús de Costa nos llevó hasta el aeropuerto Fiumicino, donde no pudimos tomar el tren Express por fallas técnicas y en su lugar tomamos un autobús a la estación central de Roma. Allí tomamos el metro que nos dejó a dos cuadras de nuestro hotel.
Esa tarde caminamos y paseamos tranquilamente por el barrio del hotel que se encontraba al noreste del centro histórico. Conocimos algunos parques y compramos algunas cositas para cenar en el balcón de nuestra habitación. El clima soleado y calientito (25 C) nos acompañaría los siguientes 3 días.
Al día siguiente, jueves, tomamos el metro temprano hacia el Coliseo Romano y como ya teníamos boletos, solo tuvimos que esperar 30 minutos para apreciar esta joya de la arquitectura antigua. Espectacular!!! Después seguimos por el Foro Romano, comimos pizza y pasta para seguir nuestro camino hacia la Fuente de Trevi y la plaza España, con su conocida escalinata. Tomamos el metro de regreso al hotel y terminamos el día rendidos pero decididos a salir al día siguiente aun más temprano para continuar con nuestros descubrimientos por la ciudad.


Nuestro segundo y último día completo en Roma lo empezamos a las 9 de la mañana, tomando el metro hacia el Vaticano. Yo conocí la Basilica de San Pedro y la Capilla Sixtina hace 20 años en mi primer viaje a Europa, y mi marido ni las niñas tenían interés en conocer estos edificios por dentro. Pero estando en la Plaza San Pedro mi marido espontáneamente quiso entrar a la Basílica y subir a su cúpula. He de confesar que yo no conocía esa opción, así que después de esperar media hora para entrar, pagamos 8€ por adulto para tomar el ascensor y apreciar la cúpula por dentro de cerca y posteriormente subir otros 165 escalones para admirar Roma desde la parte mas alta de la Basilica. Uffff! Difícil expresar con palabras la emoción que sentí al estar allá arriba! Al bajar admiramos la iglesia por dentro y a eso de mediodía nos encaminamos hacia la Plaza Navona cruzando el Río Tíber por el puente «Sant´Angelo». Volvimos a degustar platillos 100% italianos y pasamos la tarde caminando entre iglesias y ruinas romanas. Finalmente tomamos el metro de regreso a nuestro hotel donde empacamos y luego salimos a cenar a un restaurante cercano, también auténtico italiano.


Fueron dos días intensos y los pies y piernas nos dolían demasiado, pero no me puedo quejar, vimos todo lo que queríamos ver, probamos la cocina italiana que nos encanta y disfrutamos nuestros últimos días de vacaciones de otoño en familia bajo un cielo azul hermoso y una temperatura ideal: 25 C! Roma es una ciudad única en el mundo y espero volver pronto!
El sábado 14, nuestro regreso a Alemania fue tranquilo y sin contratiempos. Tuvimos el domingo para descansar y preparar nuestras cosas de escuela y trabajo para volver nuevamente a la rutina. Y así terminaron nuestras hermosas vacaciones por el Mediterráneo y el Océano Atlántico.

En la próxima entrada les contaré de los pormenores sobre el barco, el tipo de actividades que hicimos en los cuatro días de navegación y todo lo que disfrutamos en nuestro «hotel flotante». Hasta entonces!

Anuncio publicitario

Vacaciones en el Costa Magica – Parte 1

En estos años viviendo en Alemania he tenido la oportunidad de conocer el Mar Mediterráneo en mas de una ocasión: en Italia hace 2 años, en Niza Francia el año pasado y en diversas vacaciones realizadas en las costas españolas de Andalucía y Cataluña. Pero mi sueño siempre había sido hacer un crucero por sus aguas y para celebrar nuestro aniversario #15 de bodas se ha hecho realidad.

Este es mi cuarto viaje en crucero pero el primero en el Mar Mediterráneo. Los otros 3 habían sido en el Mar Caribe, 2 con la línea Costa y uno con Royal Caribbean.

El primer crucero lo hice a mis 25 años con mis padres y hermanos para celebrar sus bodas de plata y quedé enamorada de esta forma de viajar. Tres años después volví al Caribe con amigas en un crucero de solteros de Royal Caribbean. No conocí a mi media naranja allí pero sí en una reunión con las chicas que habían viajado conmigo dos semanas después.

Para celebrar nuestro 5to aniversario de bodas viajé con mi marido al Caribe nuevamente con Costa e igual que yo, quedó enamorado de los cruceros. Incluso dijimos que lo repetiríamos cada 5 años. Mmm, bueno… ese era el plan y hace 5 años no se nos hizo, pero esta vez no dejamos pasar la oportunidad.
Mis hijas han viajado dos veces en crucero con sus abuelos paternos al Mar del Norte y en ambas ocasiones han regresado fascinadas. Ya era tiempo de que viajáramos los cuatro juntos y qué mejor que al calorcito del sur europeo.

Volamos el 29 de septiembre (primer día de las vacaciones de otoño que en nuestro estado duran 2 semanas) por la tarde a Roma, haciendo escala en Paris. No me gustan los viajes con poco margen de tiempo en caso de que haya retrasos o problemas y por esta razón pasamos una noche en Fiumicino, cerca del aeropuerto de Roma.
El sábado 30 abordamos el Costa Magica después del mediodía. Definitivamente el destino no deja de sorprenderme, pues justo ese día cumplimos 17 años de conocernos en el bar Barcelona… también aquel día era un sábado.

IMG_8369
Durante 11 días navegamos por el Mar Mediterráneo y el Océano Atlántico parando en los siguientes puertos:recorrido costa
– Savona, Italia
– Marsella, Francia
– Lanzarote y Tenerife, Islas Canarias de España
– Madeira, Portugal
– Málaga, España
– más cuatro días de navegación

Para volver a Roma el 11 de octubre, donde pasamos otros 3 días para conocer la hermosa capital italiana. En otra entrada les describiré con detalle lo que visitamos e hicimos en cada lugar. El clima estuvo fantástico de principio a fin con una temperatura entre 20 y 25 grados. Algunos días el sol nos acompañó y en otros las nubes, pero nunca llovió 😉

Volvemos a Alemania cargados de energía, con un color bronceado y muchos recuerdos y experiencias guardadas en nuestra mente y corazón. Una vez más confirmo que el viajar en crucero es maravilloso y ya estamos planeando el siguiente, que si Dios lo permite será en el verano 2018 al Mar Caribe. Esta vez mis padres no solo celebrarán su aniversario de bodas con sus 3 polluelos, sino con todos sus nietos, nueras y yerno. Estoy segura que será una experiencia única y para aprovechar el viaje al continente americano, combinaremos el crucero con una estancia de dos semanas en la península de Florida y otras dos en mi ciudad natal: Monterrey!

Como leí por ahí: las vacaciones se disfrutan tres veces, cuando se planean, cuando se viven y cuando se recuerdan. Así que seguiremos disfrutando las vacaciones recién vividas y las que vendrán en 9 meses. El tiempo vuela y pronto estaremos nuevamente en el mar conviviendo en familia y coleccionando nuevos recuerdos.

No se pierdan las siguientes entradas con los pormenores de nuestro viaje, seguro se divertirán leyendo nuestras aventuras y conocerán por medio de mis fotos y comentarios lugares hermosos y paradisíacos.

A %d blogueros les gusta esto: