El diario personal de una mujer, mexicana, migrante y mamá que vive en Alemania… sus experiencias, sus anécdotas y sus opiniones!

Archivo para septiembre 19, 2016

Cómo he cambiado…

mi forma de pensar después de casi 15 años de vivir en Alemania. Recientemente comentaba con un amigo español sobre las diferencias culturales entre nuestros países y nuestra nueva patria: Alemania, y hablamos un poco de la «unión libre», tema socialmente aceptado en Europa desde hace décadas y que en México todavía no es «normal».

Mi marido quería que viviéramos juntos antes de casarnos y por diversas razones, la mayoría «miedos»: miedo al «qué dirán», a «decepcionar» a mis padres, al fracaso, etc. me negué rotundamente. Tuve suerte y nuestro matrimonio ha sobrevivido a pesar de que nos vimos poco menos de 30 días si juntamos todas las ocasiones en que coincidimos a lo largo de un año y medio. Sí, tuve suerte! Y conozco muchos casos en los que no tuvieron suerte y el cambiar no solo de estado civil, sino de país, idioma y cultura representó una carga imposible de llevar que terminó en divorcio.

Si hoy mi marido me preguntara lo mismo aceptaría sin dudar y no me escandalizaré ni «me opondré» si mis hijas (que es lo mas seguro) deciden vivir con su novio antes de casarse. No me pondré a escribir las ventajas que veo en la «unión libre» sino me concentraré en las razones que me hicieron cambiar de parecer en este tiempo.

Todos mis cuñados alemanes (hombres y mujeres) han vivido con sus parejas antes de decidir casarse y tener hijos. Y no, no se imaginen que tenían una novia diferente cada semana como yo pensaba que era la «unión libre» cuando estaba soltera. Las relaciones de noviazgo duran años y son formales, prácticamente como un matrimonio pero sin un papel de por medio. Al igual que mis cuñados he conocido muchas otras parejas que viven juntos, se respetan, son fieles y que por «x» o «y» razón pueden terminar después de un tiempo, y todos felices y contentos. Claro que el vivir juntos antes de casarse no ha eliminado el «divorcio», pero estoy segura que si se podrían evitar muchos «divorcios» en México si vivieran un tiempito juntos antes de casarse.

Observar, conocer de cerca y poder hablar del tema sin miedo a ser juzgado porque piensas de una o de otra manera es la mejor forma de vencer esos «miedos» que nos llevan a rechazar lo desconocido o a pensar que está «mal» simplemente por falta de información o sobra de «ideas equivocadas» de los demás.

Tenía 28 años cuando estaba en contra de la «unión libre» y todos los alemanes que conozco se sorprenden de que me haya casado y que haya convencido a mi marido de casarse conmigo sin «conocernos bien». Nos vamos a ir al cielo, él por bueno y yo por valiente 😉

En estos 15 años he cambiado mucho y me he vuelto mucho más tolerante en temas como el antes mencionado, el machismo, la educación sexual, la mujer que trabaja, los niños independientes, entre otros. Pero en el tema que más he cambiado de forma de pensar es aquel que tiene que ver con la homosexualidad. Crecí en una familia católica y conservadora así que mis ideas en ese tema iban desde «los gays» son pecadores, » ser homosexual» se puede curar, «Dios me libre de tener un hijo homosexual», hasta «no debe permitirse un matrimonio entre dos personas del mismo sexo porque va en contra de la naturaleza humana».

Actualmente hay una polémica sin precedentes en México por una reforma de ley que entre otros puntos, permitiría el matrimonio de personas homosexuales, baños neutros, y educación sexual en las escuelas (?). Se ha invitado a marchas a favor de la «familia tradicional» y en contra de las reformas del gobierno. Yo no he leído el documento oficial y como siempre, parece que se han sacado un par de «ideas» de dicho documento y se han rasgado las vestiduras como si fuera a llegar el demonio mismo a cada hogar mexicano.

Después de leer artículos, opiniones y argumentos a favor y en contra ya no sé si llorar o reír. Definitivamente he cambiado mi forma de pensar y no puedo tener una mente tan cerrada, homofóbica e intolerante como hace 15 años. Gracias a Dios vivo en una sociedad en donde los gays no tienen que esconderse ni casarse con una mujer para aparentar, las lesbianas pueden casarse y tener los derechos legales de cualquier matrimonio en temas de herencia, seguridad social, etc, la educación sexual se imparte a partir de 4to año en grupos de niños y niñas por separado porque empiezan por el tema del cuerpo y sus cambios hormonales, los niños ven a una pareja homosexual por la calle y no es motivo de risas ni morbo.

Aquí todavía no es normal ver baños neutros y estaría a favor de ellos, porque mi marido tuvo siempre problemas a la hora de que mis hijas querían ir al baño y yo no estaba. Incluso el fin de semana pasado fui a un evento y en el baño me tocó ver a papás que dejaban a sus niñas de 3 o 4 años en la puerta y les decían: te espero afuera. Las pobres niñas temerosas no sabían ni como cerrar la puerta con llave y yo me ofrecí a cuidar que nadie entrara porque incluso yo tenía miedo de que se quedaran encerradas. Un baño neutro permitiría que papás entraran con niñas y mamás con niños, o como lo leí por ahí personas mayores con algún acompañante.

En uno de los artículos que leí me acordé de cómo se manejaba el tema del divorcio hace muchos años en México, algo parecido a lo que ahora sucede con el tema de homosexualidad. Incluso mi mamá siempre nos decía que no quería que tuviéramos novios o novias (para mis hermanos) que fueran hij@s de divorciados. No quiero pensar si hubiéramos tenido un novio o novia divorciada! Si ya con los hijos de divorciados se ponían así. Unos años después de haber terminado con mi primer novio (hijo de divorciados) conocí a mi marido, también hijo de divorciados que al igual que la autora del artículo antes mencionado NO tiene una familia tradicional. Sus papás se divorciaron cuando él tenía 3 años y fue criado prácticamente por sus abuelos maternos porque mi suegra tenía que trabajar. Cuando Thomas tenía 10 años, mi suegra se casó con su actual esposo que también estaba divorciado y tenía dos hijos. Ambos tuvieron una hija y por su parte, el papá de mi marido se volvió a casar por las mismas fechas y tuvo 3 hijos. Si hacen cuentas, de 4 matrimonios (2 de ellos fracasados) resultaron 7 hijos de los cuales NINGUNO está divorciado, sino por el contrario todos están felizmente casados. Así queda demostrado que no suceden esas falsas teorías: «hijo de divorciado seguro se divorcia», «no te cases con divorciado, porque seguro no dura tu matrimonio», etc.

familias

Los tiempos cambian y las sociedades también. Hoy en día ya no es tan escandaloso casarse con un divorciado e incluso en mi familia (católica practicante) los hay, y recientemente sé de un caso de «unión libre». Y??? Lo importante es la felicidad de cada uno de los involucrados, y si se trata de una pareja de divorciados, o con niños adoptados, o de personas del mismo sexo, porqué se les debe criticar, amenazar o discriminar? Porque el no permitirle el matrimonio igualitario a dos personas que se quieren es discriminar y aquí les comparto otro artículo sobre un sacerdote que opina igual que yo 🙂 «El Dios de Jesucristo es antes que nada misericordia, amor, perdón, cercanía, comprensión, ternura. Y no hace acepción de personas, no tiene preferencia entre sus hijos e hijas

La reforma incluye varios puntos que se han tomado como eslogan de marchas y protestas. Aquí les comparto algo que me encontré y que intenta explicar cómo el conocer sólo una frase aislada de dicha reforma se ha prestado a malos entendidos :

Y para no alargarme más quiero terminar con ese hashtag de #amishijosloseducoyo que me da mucha risa. Educación sexual en casa? Sea en familias de nivel socioeconómico alto o bajo no me confiaría en la educación sexual con ideas como «el sexo y el uso del condón es pecado», los temas tabú no se hablan en casa, etc. Ya lo escribí antes cuando contaba como es la educación sexual en Alemania, la responsabilidad es de los dos: escuela y casa y el querer tapar el sol con un dedo al prohibir los temas de homosexualidad en la escuela, no hace que desaparezcan los homosexuales de la calle. Así como tampoco el hablar del tema duplicará el número de casos de homosexuales. Odio esa doble moral que al parecer ha aumentado en mi querido México, querer aparentar que porque no se habla de aborto, drogas y homosexualidad el mundo es color de rosa, es por demás patético. Es importante hablar de los temas de actualidad y hablarlos con naturalidad, sin tabús y con información veraz.  La tolerancia, el respeto y la comprensión deben reinar en toda sociedad.

Qué alguien me explique cómo alguien puede decir que no es homofóbico pero está en contra del matrimonio igualitario??? Entonces? Los aceptan pero no quieren que tengan los mismos derechos? Repito, el aceptar el matrimonio igualitario no multiplicará las cifras de homosexuales, y para eso los invito a visitar Alemania para que vean que la familia de papá + mamá + hijo sigue vigente. No nos hemos convertido en Sodoma y Gomorra, y si los índices de natalidad han bajado no es por el matrimonio igualitario.

He cambiado y más de lo que jamás hubiera imaginado. Me pregunto si estaría marchando en contra de las reformas si viviera todavía en Monterrey… tal vez, no lo sé. Y doy gracias a Dios por haberme traído a esta parte del mundo que abrió mi mente y que me ha hecho más tolerante. No, Alemania no es un país perfecto y tiene problemas de todo tipo como cualquier país… y no, no por vivir en Alemania estoy a favor del aborto, del consumo de drogas y del sexo entre adolescentes. Pero el vivir aquí me ha confrontado con otros puntos de vista, con una sociedad abierta que ha madurado a lo largo de la historia (no hace mucho Hitler perseguía homosexuales también) y con gente de diferentes religiones, colores y preferencias sexuales.

Una disculpa por haberme extendido tanto… Hay tantos temas que de verdad deberían preocupar a la sociedad mexicana, y desgastarse en este tema y ver como las opiniones son de uno o de otro extremo, es muy triste. Basta de prejuicios, miedos e inseguridades! Viva el amor, la tolerancia, la paz, la misericordia, la verdad, el respeto y la diversidad!

P.D. Qué quede claro que mi intención no es convencer a nadie ni cambiar el punto de vista de nadie. Tal vez el hecho de ser migrante y a la vez minoría en nuestra nueva patria nos hace ser mas tolerantes, ya que somos blanco fácil de discriminación. Y hablo en plural porque la mayoría de mis amistades mexicanas que viven fuera de México piensan ahora como yo. Casualidad? Tal vez.

 

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