Mariposa Migrante

Lo hacía en forma de correo electrónico y cada mes escribía una especie de carta con lo que habíamos hecho, lo que había aprendido Victoria e incluía algunas fotos recientes. Al igual que hoy en día, la retroalimentación era mínima, pero aún así lo seguí haciendo.

Curiosamente guardé una copia de estos correos en la cuenta de mail y ahora forman parte de un cartapacio que tiene esos primeros escritos de forma impresa y todas las entradas de este blog. Sí, lo tengo todo impreso por si alguna vez se pierden mis memorias en el infinito cibernético. 

Escribí cada mes sin falta hasta el primer cumpleaños de Victoria, pero como ya estaba embarazada de nuevo, no me costó trabajo continuar con el envío de novedades y empecé otra serie de 12 correos mensuales sobre la vida de nuestra nueva hija, Catalina.

Fue un mes después del cumpleaños número 1 de Catalina, cuando escribí mi primera entrada en un blog. Era de MSN y se llamaba Myspace, por lo que lo titulé «Espacio de una mexicana en Alemania». Escribía sobre mis experiencias en mi nueva patria, lo que me gustaba y lo que me sorprendía, los descubrimientos como mamá en Alemania y nuestros paseos o vacaciones.

Justo tres años después, ese sitio de internet cerraría sus puertas y se ofrecían dos nuevos sitios, de los cuales elegí Blogspot como nuevo hogar de mis escritos. No se pudieron transferir las entradas del primer blog, pero al menos las pude guardar y luego imprimir. Desde septiembre del 2010, escribo regularmente en este blog con un promedio de 5 entradas por mes. Me encanta escribir y siempre encuentro temas nuevos para compartir.

La retroalimentación sigue siendo poca, no tengo muchos seguidores y mis entradas reciben pocos comentarios. No importa, seguiré escribiendo como pasatiempo, como medio de comunicación con mi familia en México y como fuente de información para gente que busca sobre lo que escribo en internet.

Pero la razón más importante de seguir escribiendo es mi mala memoria… y como sé que de muchas cosas no me acordaré en mi vejez, este blog servirá para recordar detalles y experiencias que seguramente me harán reir y revivir 🙂 Así, que a seguir escribiendo! Por otros 10, 20 o 30 años! Sólo Dios sabe 🙂