Los musulmanes y su Ramadan
Desde hace 2 o 3 años que formo parte de un Círculo Femenil en una institución de la ciudad, donde se ofrecen conferencias una vez al mes. Los temas son de lo mas variado y el verano pasado me preguntaron que si quería formar parte del equipo organizador. No es mucho trabajo y como quiera me gusta asistir cada mes, así que acepté la invitación.
El equipo lo formamos 6 mujeres, todas madres de familia de diferentes nacionalidades: 1 alemana, otra de Turquía, la fundadora del Círculo que es de Sierra Leona pero estudió en Inglaterra, otra de Rusia y yo.
Este mes el tema elegido fue «Ramadán en Turquía» y la encargada abrió el tema con una introducción del Ramadán y después se dejó el tema sobre la mesa para preguntas, comentarios e intercambio de ideas.
Siendo católica mexicana viviendo en Alemania, donde cada vez viven más musulmanes, el tema me interesó desde el principio. Poco a poco he ido conociendo más mujeres en mis círculos de amistades procedentes de países musulmanes y he de confesar que sé muy poco de esa religión. Así que asistir a esta plática y aprender algo del Ramadán fue un primer paso.
Les comparto lo que aprendí en un par de horas de mesa redonda formada por 10 mujeres, 4 musulmanas y el resto cristianas (2 católicas entre ellas): El Ramadán es un período de tiempo (29 o 30 días) donde se ayuna y que forma parte de los 5 pilares del Islam que son:
La profesión de Fe
La oración
La limosna
El Ayuno y
La peregrinación a la Meca
La fecha el Ramadán varía año con año pues se basa en el calendario lunar. Estan exentos del ayuno las mujeres embarazadas, que esten lactando o en su menstruación, los ancianos, enfermos y niños. El ayuno consiste en no comer ni beber nada desde la salida hasta la puesta de sol. Y además de ayunar, deben de donar lo ahorrado en el ayuno para los más pobres. Al ponerse el sol, las familias se reúnen a cenar y normalmente se invitan a amigos o vecinos a compartir la cena, invitaciones que no deben rechazarse.
El ayuno no es sólo físico, sino el mes del Ramadán es un tiempo de muchísima oración, espiritualidad y contacto con el alma. La gente no debe reñir, ni discutir, sino por el contrario, concentrarse en la oración y hacer bien a los demás.
En la plática, se habló mucho del Corán: libro sagrado del Islam y que se lee completo durante el Ramadán. Allí llevaron uno con traducción al alemán y tenía mas de 600 páginas. Aprendí que el Corán siempre esta en dos idiomas, el árabe (original) y otro, ya sea inglés, alemán, francés, etc. Las hojas estan divididas en dos columnas (una para cada idioma), y así se puede saber lo que significa un párrafo u oración en particular en los dos idiomas. Normalmente, se reza 5 veces al día y una persona de la familia lee en voz alta, de preferencia en árabe. Los demás pueden seguir la lectura en el otro idioma.
Aquí se comentó de la ventaja del Corán sobre la Biblia, que al mantenerse en el idioma original no ha perdido su verdadero significado, cosa que con la Biblia traducida a tantos idiomas ha perdido mucho del origen. El Corán debe ocupar siempre el lugar mas alto en el hogar sobre otros libros, cosa que me llamó mucho la atención. Y nosotros, donde tenemos la Biblia en casa?
Dos de las asistentes musulmanes han dedicado años de su vida en leer los evangelios y compararlos con el Corán. Comentaron que hay muchísimas similitudes, entre ellas el ayuno. Claro que se comentó de cómo se ha perdido esta tradición entre los cristianos, independientemente si son católicos o protestantes. Los musulmanes a pesar de tan ser criticados conservan sus tradiciones y me consta por estas amigas que a pesar de vivir en el extranjero, siguen el ayuno y muchas de sus tradiciones religiosas tal y como si vivieran en su país de origen.
Tengo que aceptar que lo que conocía de los musulmanes hasta el momento era mas bien negativo y se debe a los fanáticos que acaparan los titulares de noticias y programas. Poco a poco descubro que el islam esta basado al igual que el cristianismo en valores universales y que no es raro ver como algunos alemanes sin sentirse identificados con el cristianismo, cambian al Islam.
En fin, es muy interesante aprender un poco de todo y estar abiertos a otras culturas, otras tradiciones y otras religiones. No digo que vaya a cambiar mi religión, creo que tengo mis bases bien puestas pero al vivir en un país tan multicultural es importante respetar y aceptar nuestras diferencias.
El siguiente mes el tema será «La integración en Sudáfrica y en Alemania» y seguramente aprenderé mucho de como blancos y negros conviven en África, pues la ponente nació en Sudáfrica y ya tiene 30 años en Alemania. Cabe mencionar que yo también tengo mi tema, y en Mayo hablaré de las tradiciones en México y haremos piñatas. Así que yo también pongo mi granito de arena en compartir nuestras costumbres y tradiciones por este lado del charco.
PD. VIVA EL MULTI-CULTI!